Juan Carlos Díaz Lorenzo

El presidente de la Comunidad Autónoma de Madeira, Alberto Joao Jardim, considera que el Gobierno regional que preside “fue chantajeado” por los responsables de Naviera Armas, informa la edición digital del periódico dnoticias.pt.

Por lo que se ha publicado, el presidente del Gobierno de Madeira –que lleva instalado en el cargo más de treinta años- dijo tener conocimiento de la petición de exención de tasas portuarias después de que Naviera Armas hubiera iniciado negociaciones con los clientes para el aumento de las tarifas.

Jardim -cuya esposa fue la madrina en la botadura del ferry «Volcán del Teide»- precisó que la pretensión de la naviera canaria no podía ser atendida ya que, de concederla, las restantes compañías que operan en los puertos madeirenses también solicitarían una disminución de los costes asociados a las tarifas portuarias.

El final de la línea produce un serio quebranto al pueblo de Madeira

El presidente autonómico manifestó que su gobierno estudia posibles soluciones alternativas. El ambiente en Madeira se ha enrarecido bastante con la noticia del final de la línea Canarias-Funchal-Portimao, por lo que supone quebrar la conexión marítima entre la isla y el continente, impidiendo con ello el tráfico de pasajeros y carga rodada.

Medios de comunicación y blogueros marítimos portugueses están siendo muy críticos y contundentes con la situación y han forzado la intervención de la oposición, representada por el Partido Socialista (PS), cuyo diputado Jacinto Serrao ha pedido la presencia de Naviera Armas en la Comisión de Economía y Obras Públicas, para que se esclarezcan los problemas que han conducido a esta situación.

Asimismo, el diputado socialista ha pedido la comparecencia de la secretaria regional de Turismo y Transportes, Conceiçao Estudante, para que explique la situación ante el Parlamento. Todo ello envuelto en la desconfianza que les produce la actuación del Gobierno regional de Madeira con los obstáculos que ha puesto que impedir la permanencia de Naviera Armas en la citada línea.

Foto: Luis Miguel Correia